Jesús es el bálsamo para nuestras heridas.

Jesús no te abandona en tu proceso.

Seamos los padres que esta generación necesita.

La bendición de Dios es generacional.

Seamos responsables con el regalo de Dios.

Un verdadero discípulo ama.

Procura que tu taza esté llena de Él.

Dios está buscando verdaderos seguidores.

Los campeones no se rinden.

“El verdadero cambio no aparenta, nace del corazón.”

Primero cambia tu mente.

Olvida el pasado y sigue adelante.

Si no me cuesta, no es lo mejor.

Regálale a Dios tu tiempo.

Mi Regalo es Amar

Permanecer es señal de madurez.

Nuestra responsabilidad glorifica a Dios.

No temas la corrección.

Decide crecer.

Dios celebra tu regreso.