CDA Lares
IGLECASA 2-NOVIEMBRE-2021
#IglecasaDeOración #CDALares #MásComoÉl

Un Modelo a Seguir
¿Por qué Dios quiere que seamos conformados a la imagen de Su Hijo? Cuando Dios creó a Adán y Eva en el jardín del Edén, los creó a Su imagen. Para que pudieran conocerlo, adorarlo y tener comunión con Él. Después, el pecado arruinó esa imagen, pero Jesús vino para restaurarla. La santificación es un proceso donde nos asemejamos más y más a Él. Un día Jesús vendrá, y seremos transformados tal como Él es en Su cuerpo glorificado. Mientras tanto, debemos trabajar para parecernos más a Él. Si queremos saber acerca de nuestro progreso en esa área, debemos preguntarnos: ¿nos estamos volviendo más como Jesús? ¿Estamos cumpliendo el propósito de Dios en nuestra vida?
Cuando le pedimos a Jesús que entre en nuestras vidas, comenzamos una relación de por vida con Él. Igual que un niño que pasa mucho tiempo con su padre, cuanto más tiempo pasamos con Jesús, más nos volvemos como Él. Jesús quiere darnos más de su bondad cada día. No importa cuánto tiempo sigamos a Jesús, siempre hay más que aprender de Él, más de Su amor que experimentar, y más de Su carácter que asumir. En 2 Corintios 3:18 dice: “Así que, todos nosotros, a quienes nos ha sido quitado el velo, podemos ver y reflejar la gloria del Señor. El Señor, quien es el Espíritu, nos hace más y más parecidos a él a medida que somos transformados a su gloriosa imagen.” (NTV) La obra del Espíritu es empujarnos, estimularnos, y moldearnos para pensar más como Jesús, reflejar mejor a Jesús en nuestro carácter, y ayudarnos cada vez más a amar como Jesús en nuestra vida diaria.
Por supuesto, esto no ocurre de la noche a la mañana. No es una entrega de 24 horas. Este no es el trabajo de un mensajero. Esta es la obra del Maestro. Aquél que, diariamente, trabaja en nuestras vidas hasta que finalmente florezca el fruto espiritual deseado. Hay momentos en que la obra del Espíritu en nosotros es inmediata, dramática y tal vez incluso espectacular. Pero, por lo general, la obra del Espíritu en nosotros es lenta y gentil. Esa es su marca registrada. Él no tiene prisa, se toma su tiempo en perfeccionarnos. Así que no debemos abrumarnos por este proceso, ni tratar de apresurarlo. Fuimos hechos a la imagen de Dios, pero esa imagen está estropeada y contaminada en nosotros a causa del pecado. Así que ahora Dios está rehaciendo lentamente esa imagen en nosotros, ¡para ser como Jesús! Tomará tiempo, pero Dios siempre termina lo que comienza.
Oración:
Señor, gracias por la obra de tu Espíritu Santo en nosotros. Ayúdanos a crecer y a ser más como tu Hijo, Jesucristo. Que cuando nos encontremos en situaciones donde tengamos que tomar una decisión tomemos la decisión que Tú escogerías . En el nombre de Jesús oramos, Amén.
Durante este mes ora:
Para que el Espíritu te ayude a entender la importancia del proceso de santificación. (Levítico 20:26; Mateo 5:48;1 Pedro 1:15-16; 1 Juan 3:2-3)
Para que el Espíritu te ayude a estar dispuesto a caminar en santidad, dando testimonio a esta generación y gloria a Dios. (Romanos 6:19; Filipenses 2:14-16a)
Para que el Espíritu te revele cuál es el próximo paso en el camino de la santificación. (Salmos 51:10; Salmo 139:23-24)
Que el Espíritu te enseñe a usar la Palabra como una herramienta de santificación. (Juan 17:17)