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“Fe”
Dinámica: Busca un llavero y observa cómo cada llave es diferente.
Cada una es única, y abre sólo una cerradura. La función de una cerradura es proteger las cosas valiosas y restringir el acceso de aquellos que no estén autorizados.
Entonces reflexiona en lo siguiente, si las bendiciones de Dios estuvieran protegidas por una cerradura, ¿nos habrá dado Dios una llave maestra para alcanzarlas?
"Porque andamos por fe, no por vista."- 2 Corintios 5:7 (RVA-2015)
Los cristianos debemos andar por fe, por lo que creemos que Dios ha dicho y no por lo que vemos. Por la fe recibimos todo lo que Dios quiere darnos. Recibimos la sanidad, la salvación, la liberación, el bautismo del Espíritu Santo y toda bendición. La fe nos conecta con nuestra bendición. Cierto joven dijo una vez: "La fe es como el wi-fi, es invisible, pero tiene la capacidad de conectarnos con aquello que necesitamos."
La Fe declara el poder infinito y sobrenatural de Dios. No importa lo que estemos atravesando, por fe sabemos que todo saldrá bien (Salmo 23:4) y de esta manera recibimos la paz y el gozo que forman parte de sus bendiciones para nosotros. La persona de fe se lanza a la aventura con Dios, pues confía en El. En Mateo 14.28–29 Pedro ve a Jesús sobre el agua y le dice: "si eres tú, que yo vaya a ti sobre las aguas." Jesús le dice: "Ven.", y Pedro camina sobre las aguas.
El lema de Pedro parecía ser si perezco que perezca, pero mi fe me conectará a la bendición. Todos estaban en el barco, solo la fe de Pedro lo conectó a una nueva bendición, a un nuevo nivel. Solo él se atrevió a bajar del barco. Pedro tenía muchos defectos, pero su fe era aventurera y conectada a múltiples bendiciones.
La fe no depende de las circunstancias. Lo que diferencia al creyente del incrédulo es que en medio de las situaciones difíciles podemos hablar distinto a como habla el mundo. Si tienes fe, podrás ver las bendiciones antes de que lleguen. Porque se trata de creer y confiar en que Dios te va a bendecir porque así lo estableció en su Palabra. Aunque el panorama diga lo contrario, tu fe es la llave que abrirá las puertas de los cielos para recibir tu bendición.
Verdad de la Semana:
“Tu fe te conecta a tu bendición.”