_PNG.png)
“Sin embargo, en todo esto somos mas que vencedores por medio de aquél que nos amó”- Romanos 8:37 (NVI)
¿Cómo no estudiar las enseñanzas del Apóstol Pablo cuando de valentía y carácter se trata? Podríamos decir que en este pasaje se nos muestra perfectamente nuestra motivación como creyentes: somos más que vencedores. Esa es nuestra verdad, y es una verdad que puede renovar nuestra mente. La renovación de la mente nace de conocer la verdad. Cuando conocemos a Dios, Su verdad nos cambia. Además, Su Espíritu vive en nosotros, por lo que tenemos la mente de Cristo. (1 Corintios 2:16) Esto hace que nuestra mente cambie de una mentalidad de derrota, a una de victoria. Para luchar hay que ser valiente, pero para levantarse de una batalla hay que tener la mente de Cristo, la mente de un vencedor.
Jesús no se aferró a la debilidad de su cuerpo humano o a la frustración de que su pueblo lo rechazó. Mas bien, caminó con la visión de la obra completada. La expectativa de victoria. Al igual que Jesús, cuando llegan las pruebas es cuando podemos descubrir “de que madera estamos hechos” por la fortaleza de nuestro carácter al perseverar en las dificultades. Pero hay sólo una cosa que nos ayudará a perseverar, y es la firme convicción en Jesús que nos da una mente renovada. Nuestros pensamientos se llenan de esperanza cuando vivimos por sus promesas. Así podemos seguir adelante, pues nuestra mente no se encuentra en el suelo, sino en la victoria.
En el mes de mayo, denominado para la sociedad como “el mes de la Salud Mental”, se intenta integrar muchas técnicas de autoayuda. Pero ninguna de ellas será tan efectiva como la Palabra de Dios para lograr un cambio en nuestra mente. Este cambio se hace más evidente, cada vez que perseveramos en nuestras dificultades. Pues cada circunstancia que enfrentamos nos da la oportunidad de renovar nuestra mente por la verdad de Su victoria. Así aprendemos cómo levantarnos, una dificultad a la vez.
“Y no sólo esto, sino que también nos regocijamos en los sufrimientos, porque sabemos que los sufrimientos producen resistencia, la resistencia produce un carácter aprobado, y el carácter aprobado produce esperanza."- Romanos 5:3-4 (RVC).
Verdad de la Semana:
La mente de Cristo nos levanta.