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Foto del escritorCDA Lares

Nuestro Estándar

Esa misma noche, los hermanos enviaron a Pablo y Silas hasta Berea. Y cuando éstos llegaron allá, entraron en la sinagoga de los judíos. Éstos eran más nobles que los de Tesalónica, pues recibieron la palabra con mucha atención, y todos los días examinaban las Escrituras para ver si era cierto lo que se les anunciaba.- Hechos 17:10-11 (RVC)

Lucas ha hecho una cuidadosa distinción aquí entre los judíos en Tesalónica, con la que Pablo y sus amigos se encontraron anteriormente en el capítulo 17, y estos judíos en Berea que eran más nobles. ¿En qué consistía su nobleza? Bueno, en no sólo recibir la Palabra, sino en escudriñarla con las Escrituras. Una persona noble es aquella que no sólo tiene una mente abierta sino también un corazón cauto. No aceptará una enseñanza a menos que la escudriñe con las Escrituras.


Para eso están las Escrituras. Son nuestra guía para distinguir entre lo que es verdad y lo que es falso, lo que está bien y lo que está mal. Y a menos que un cristiano haga esto, está perdido en un mar de relativismo, donde no sabe lo que está bien y lo que está mal. Ese es el problema que tenemos hoy. Tu mente se confunde y se ciega, y puedes ser engañado y manipulado, como las personas en Tesalónica, a menos que tengas la nobleza de escudriñar las cosas de acuerdo con las Escrituras. Esto es lo que hicieron estos judíos, y era una ayuda tremenda. Investigaron al apóstol Pablo, ellos querían estar seguros de que lo que decía era correcto antes de aceptarlo.


El valor de esta historia para nosotros, y la razón por la cual Lucas la incluye, es que podamos aprender la necesidad de poner a prueba cualquier palabra del hombre. No escuches a un solo hombre, ni leas los libros o mensajes de una sola persona. Ésta es una práctica muy peligrosa. Serás engañado por sus errores y no sabrás como reconocerlos. Investiga lo que leas con lo que dicen las Escrituras y compáralo con lo que dicen otros maestros y predicadores. Busca lo que dice la Palabra de Dios. Ésa es la autoridad, ese es nuestro estándar. La Biblia no debe ajustarse a nuestra vida, nuestra vida se debe ajustar a la Palabra. Ninguna ideología o pensamiento es verdad si no está a la altura de la verdad de la Palabra.

 

Verdad de la Semana:

La Palabra de Dios es nuestro estándar.





Adaptado de: Ray Stedman


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