Déjame ver tu cara; déjame oír tu voz. Pues tu voz es agradable, y tu cara es hermosa.- Cantares 2:14 (NTV)
Cuando pedimos pon, una de los aspectos más importantes para definir cómo fue el viaje es el ambiente y cómo era la persona. Es incómodo pedir pon y terminar con alguien que está de mal humor. Puede ser aún peor ir todo el camino en silencio. Pero viajar mientras tenemos una conversación agradable y provechosa es una de las mejores experiencias que podemos tener. Muchos cristianos consideran importante mantener una conversación constante con Dios, pues nos lleva a una relación más profunda con el Señor y nos ayuda a entender nuestra vida. Sin embargo, en la práctica no solemos ser tan consistentes.
Es raro que queramos que una persona guíe nuestra vida cuando no estamos dispuestos a mantener una conversación con esa persona. Por lo general, le pedimos pon a alguien de confianza. Y la conversación hace que el viaje sea menos abrumador. Mantener una conversación con Dios nos permite expresar nuestros pensamientos y preocupaciones para que podamos experimentar conexión e intimidad con Dios. El nos entiende. Esta comunicación fortalece nuestra fe y profundiza nuestra relación con Dios. Podemos buscar Su guía al afrontar los desafíos y decisiones de la vida, y esto nos ayuda a reconocer nuestra dependencia hacia Él. No es un extraño, es nuestro creador, nuestro redentor y nuestro Padre. Es el director de nuestra vida, ¿por qué no aprovechar el viaje para conocerle mejor?
Dios no es sólo un chofer que hace su trabajo, no le molesta que le hablemos, El quiere enseñarnos y compartir con nosotros. No interrumpimos su trabajo cuando nos acercamos. Quiere que le conozcamos mejor. Tal vez al principio no se sienta así, cuando aún no le conocemos profundamente. Pero, el pon es para llevarnos a su casa, entonces aprovechemos el viaje para conocerle mejor. Sería una pena ir todo el camino en silencio o peleando por cuál camino tomar. Después de todo, vamos camino a vivir con El, y El conoce el camino a su casa mejor que nosotros. Entonces, mejor disfrutemos el viaje, ya El hizo todo lo demás.
Verdad de la Semana:
Disfruta el camino.
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